Tejón de la miel: características y curiosidades

El tejón de la miel es un mamífero carnívoro que vive en Oriente Medio, el subcontinente Indio y África. A diferencia de lo que su nombre indica, en realidad no es un tejón, sino que forma parte de la familia de las comadrejas. En la edad adulta, los machos pesan 15 kilos y las hembras 10 kilos. A pesar de lo reducido de su peso, es capaz de vencer a otros animales mucho más grandes y fuertes que él, como serpientes, cocodrilos e incluso leones.

Es bien conocido por su ferocidad, hasta el punto de que en 2002 pasó a formar parte del libro Guinness de los Récords como «el animal más fiero del mundo». Tiene unas garras muy afiladas y largas, con las que puede rajar casi sin esfuerzo el caparazón de una tortuga.

Además, su piel es tan dura y gruesa que las mordeduras de sus depredadores no llegan a atravesarla. A esto hay que sumar que la piel está separada del cuerpo, así que puede revolverse con gran facilidad cuando le atacan.

Vive en la mayor parte del África subsahariana y en algunos países de Asia, como Irak, Pakistán, Nepal e India. Aunque no se ha podido demostrar el mecanismo fisiológico mediante el cual puede hacerlo, sí se sabe que este animal es inmune a casi todos los venenos de serpiente.

¿Por qué es tan peligroso?

Es muy poderoso, y cuenta con una serie de características físicas que hacen que el tejón de la miel sea un adversario al que es casi imposible vencer. Cuando lucha cuerpo a cuerpo contra otro animal, se puede dar la vuelta dentro de su propia piel para atacarlo de forma letal. Sus uñas y dientes son afilados y largos, hasta el punto que pueden destrozar el caparazón de una tortuga con un simple rasguño.

El animal es omnívoro, de forma que come de todo, incluso serpientes que serían mortales para cualquier otra especie, como por ejemplo las cobras. Además, si una serpiente venenosa muerde al tejón de la miel, éste sólo tiene que descansar durante unos minutos para eliminar el veneno de su organismo. Así de fácil.

Pasa la mayor parte del tiempo buscando alimento, y se dice que en Pakistán llega a desenterrar los cuerpos de las tumbas cuando no encuentra comida.

A todo esto hay que sumar que es un animal caníbal. Sí, los ejemplares adultos pueden comerse a las crías, y esta es la razón por la que apenas el 50% de los ejemplares llegan a la edad adulta.